domingo, 15 de octubre de 2006

Chinatown y Times Square

El día no pudo comenzar mejor, porque nada más levantarnos pudimos ver a Carlitos por la webcam, lo que sirvió para aplacar el gusanillo de niños que tenemos. Se les echa mucho de menos, y esta forma de aliviarnos resultó además más económica que la que llevamos practicando hasta ahora, que no es otra que dejarnos "los cuartos" en todos los juguetes y souvenirs que nos recuerdan a ellos. Luego, para aplacar el otro gusanillo, el más prosaico (el de la barriga), mi hermano nos llevó a Chinatown (que me gusta mucho a mí esto "de decirlo": chainataunnn... es que suena guay) a comer los mejores dumplings de Manhattan. Los dumplings son bolsitas de pasta rellenas de carne y sopa, aunque pueden rellenarse con cualquier cosa en realidad, sin llegar a los extremos de la película de Fruit Chan (puaj). El restaurante en cuestión se llama Joe's Shangai, y a juzgar por las colas que se forman allí (aunque nosotros tuvimos suerte y entramos in one go, uséase, del tirón) parece que mi hermano no es el único que conoce sus famosos dumplings. Después del atracón (Dani incluso se llevó la clásica doggie bag o bolsa con las sobras) dimos una vuelta por las concurridas calles del barrio y compramos algunos souvenirs, no sin antes enfrentarnos a una señora china que era mejor que Ronaldinho regateando. Si nos quedamos un poco más allí nos vende hasta la muralla china, la joía (se quedó en la puerta gritando su último precio por un bolso y un chipao o vestido chino que Silvia había estado echando un vistazo). Tras salir del caos de gente y mercados de Chinatown, pusimos rumbo a Times Square, la impresionante exposición de neón y pantallas situada en el cruce de Broadway con la sexta. Al llegar era ya la hora de merendar (aunque en NY ya era casi de noche), así que optamos por entrar en un Jamba Juice, una franquicia de zumos y batidos que son una auténtica delicia. Con el dulce sabor de los jamba nos metimos en la mastodóntica tienda que tiene Toys 'r' us en Times Square, un auténtico mini-parque de atracciones, con una noria y un Tiranosaurius Rex en tamaño natural (y con sonido y movimiento) que hubiese hecho las delicias de Marcos. Por cierto, casualidades de la vida, en Times Square también pudimos ver un acto de la Campaña del Milenio, la del Levántate ZP que comenté hace poco, en el que al parecer se batió un récord guiness (yo la verdad es que le hice un par de fotos a Manute Bol, que estaba por allí, y me fuí).

Terminamos el día en la pizzería preferida de mi hermano, la Sezz Medi de Harlem, donde probamos sus exquisitas pizzas ortolana, cuattro stagioni y pastore hechas en horno de ladrillo (mmmm...).

Chainatauunnnnnn!!!

Times Square Bros.

Nueva York hoy es una sola voz: Levántate... NASDAQ.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

joer, esto esta mejor que la parsela mardita, besos a los 2. pablo.

carlotus dijo...

¡¡ PABLITO !! No te quepa la menor duda de que un día de estos sales en este blog, como coprotagonista que eres de ese clásico del cine de terror pacense-campestre.

Estén atentos: "La parsela mardita", próximamente en sus pantallas, jeje...

Anónimo dijo...

jajaja, lo que mas me ha impresionado, aparte de que te dejaran entrar en NY, es la familia guapa que teneís. a ver si cuando vengas nos vemos un ratino al menos para ¨escojonarnos¨ un poco. Por cierto, me dan espasmos de ¨envidiajoiacochinadelamala¨ de ver como os lo pasasteis en NY. CAPULLOS.